Hoy en este artículo hablaremos de la buena
imagen profesional para poder causar un mayor impacto. Si pretendemos ser
tomados en cuenta para diferentes proyectos o queremos alcanzar metas más
altas, debemos comenzar por revisar si nuestro atuendo esta en congruencia con
lo que quiero lograr.
Sin embargo, hay un elemento que no hemos
profundizado y que en muchos casos se convierte en piezas clave de nuestra
imagen, el lenguaje corporal.
El otro día llegue a una oficina con la intención
de arreglar un asunto personal. Se encontraban dos señoritas atendiendo el
mostrador. Una parecía que estaba teniendo un mal día, su rostro mostraba
rasgos de enfado y su voz denotaba mal
humor, no hacia contacto visual y sus movimientos eran cortantes e incluso
bruscos. La otra señorita se le veía tranquila con una sonrisa y se mostraba
atenta a lo que se le estaba diciendo. La señora delante de mi comento que
esperaba que le tocara con la señorita “amable”, porque ella parecía que si
resolvía las cosas.
En ese momento me di cuenta que ya las había
catalogado a cada una, y sin antes haber cruzado palabra, ya suponía que lo
mejor era evitar a la “malhumorada”. Con este claro ejemplo no sería difícil
suponer quien de las dos seria la candidata ideal para lograr un ascenso.
Muchas veces nos preguntamos por qué no nos
toman en cuenta o como si siendo el de
mayor experiencia buscan a otros. Es probable que el mensaje que se está
enviando no sea el indicado. Debemos darnos cuenta de lo que está proyectando
nuestro cuerpo, porque podemos estar enviando señales negativas, que por
supuesto a nadie le gusta recibir.
Quizá por alguna cuestión de género, es más
fácil que a una mujer se le note a través de su lenguaje corporal lo que está
sucediendo en su interior. Por eso te recomiendo que analices no estar
cometiendo algunas de las siguientes
señales negativas:
-
No
hacer contacto visual.
-
Cuando
alguien te habla, distraerte con algún otro objeto o con alguien que va
pasando.
-
Estar
viendo el reloj a cada rato cuando se dirigen a ti.
-
Cruzar
tus brazos. Sentarte al borde de la silla como si tuvieras prisa por irte.
-
Levantar
las cejas y/o torcer la boca cuando algo no te parece.
-
Mascar
chicle.
-
Usar
una voz cortante para contestar.
En cambio si buscas
convertir todas estas señales a un mensaje positivo:
- hacer contacto
visual.
- párate con una
postura equilibrada.
- asienta con la
cabeza en señal de aprobación o de escucha.
- sonríe.
- habla con tono de
voz moderado.
Si lo que buscas es
hacerte notar en el ámbito laboral tu actitud tiene que ser positiva. No
permitas que tu imagen profesional se demorase, proyecta tu crecimiento a
través de un lenguaje corporal adecuado.
Si tienes alguna duda o comentario puedes
contactarme por Facebook: https://www.facebook.com/DanielOrtizColi https://www.facebook.com/DaorInformacion twitter: https://twitter.com/DaorColima .
No hay comentarios:
Publicar un comentario