lunes, 16 de mayo de 2016

CUANDO QUREMOS PAREJA PERO NO QUEREMOS COMPROMISO…


¿Cuántas veces nos hemos puesto a pensar en cuánto deseamos tener una pareja, un ser que esté a nuestro lado, apoyando, dando afecto, haciendo planes, jugando y hasta peleando? y es que lo deseamos tanto que comenzamos a idealizar una serie de cosas que se convierten en el nirvana de nuestro futuro personal, y así, mágicamente, aparece una persona que se convierte en prácticamente ese ideal, pero de alguna manera en un momento igual de represivo terminamos saboteándolo, nos aburrimos, nos hartamos y después nos preguntamos el porqué de nuestro actuar.

¿Qué pasa cuando solo queremos alguien que llene nuestras carencias, nuestros huecos afectivos, pero no nos detenemos a pensar si estamos listos para una relación? Es cierto que nadie tiene la fórmula para una relación perfecta, pero hay un mínimo de requisitos, que al menos en lo personal se necesitan para poder entablar una relación con alguien: respeto, atracción física, proyectos en común, ganas, en fin, una serie de cosas que no nos ponemos a pensar si las tenemos cuando llegue esa persona, solemos pensar en lo que queremos del otro, pero no en lo que podemos dar, solemos pensar en lo que queremos a futuro, pero no en lo que estamos dispuestos a vivir en el ahora.

No es que esté diciendo que debemos saberlo todo, que debamos emprender un viaje a la India y encontrar la verdad de la vida antes de conocer a alguien, pero sí creo que debemos tener la conciencia de que muchas veces, aunque nuestra voz exterior nos dice que desea un príncipe azul, a veces, nuestra conciencia nos dice que no estamos listos, o que simplemente no estamos en el momento de otorgar lo que se necesita para una relación.


Nadie es perfecto relacionándose, pero si somos honestos con nosotros mismos, podremos empezar a ser honestos con los demás que nos relacionemos, así, un día nuestra verdad coincidirá con la verdad de alguien más, y con mucha suerte, y decretos personales sobre todo, conseguiremos conocer al príncipe azul o del color que nos haga felices.

No hay comentarios:

Publicar un comentario